La población en general conoce poco sobre cómo se desarrolla actualmente la actividad minera formal, cómo se regula, cómo el estado la fiscaliza y el aporte que ésta realiza a la economía nacional y de las regiones del Perú. Asimismo, a veces se confunde la actividad minera formal con la informal e ilegal, y se habla como si todo fuera lo mismo. Estas dos situaciones, junto a otras, contribuyen a la desconfianza que una parte de la población tiene sobre el sector minero. En ese sentido, me parece muy importante que se impulse con mayor énfasis y prioridad, iniciativas como son los Comités de Gestión e Información Minero Energéticos, y otros que desde el estado y la sociedad civil involucre a la empresa, organizaciones, instituciones, universidades, etc. y que permita difundir el conocimiento y las buenas prácticas que actualmente se desarrolla en el sector.